Sobre mi

Bueno, antes de todo me llamo Jose. Tengo 35 años y vivo con mi novia de 33 años.
Nuestra relación no es precisamente larga, llevamos unos 6 años juntos a fecha de hoy pero
si nos conocemos de toda la vida, prácticamente. Nuestra vida sexual es plena, no existe nada
que yo necesite de ella, simplemente me da todo y percibo que a ella igual. No tengo complejo
alguno, mi cuerpo es normal ni gordo/delgado ni musculoso de gym. Sobre mi polla puedo decir
que me mide 20cm aproximadamente. Me considero muy varonil y seguro de mi mismo.

Así que en resumen:
Soy hetero
Tengo y doy todo en el sexo
Y soy bien apañado de herramienta sexual

Porque tengo entonces tantas fantasías de ser cornudo?

1º Porque me gusta verla disfrutar
2º Porque me gusta lucirla, siento orgullo de compartirla
3º Porque así saco el lado sucio de ella, y eso me gusta, con todo respeto, cuanto mas puta mas me pone.
4º Porque solo yo puedo cumplir sus fantasías, y eso me hace sentir bien.
5º El hecho de entregarla hace que tenga siempre que superarme y ser el mejor en la cama

Esos son así a priori  los primeros motivos por lo que me da morbo ser cornudo, pero sin embargo
no estoy orgulloso de ello. Contradictorio verdad?
Me considero tan buen hombre en la cama, y me gustan tanto las mujeres que no entiendo como en vez
de fantasear un trio con otra mujer pienso en un trió con otro hombre. Un dilema mio

No tenemos muchas experiencias. Solo conocemos a un hombre con el que quedamos de manera
ocasional y a día de hoy suman 5 citas. Quizás una vez o dos al año nos damos nuestras veladas y cada vez son mas geniales. Existe un
gran respeto entre el y yo, confianza y eso a la vez hace que cierta afinidad. No voy a decir que sea
amigo, porque no nos vemos mas que para estos juegos, pero siento que es una persona adecuada a lo
que nosotros queremos tener.

No me gustan los hombres que van de sobrados. En el mundo del cornudo he podido ver que existen muchos juegos de humillación, por parte de su esposa y por parte del amante. Eso no hablemos ya de los juegos bisexuales en sentido de humillación o limpieza posterior a la corrida de el. Eso no va conmigo pero evidentemente respeto al que le guste.
El hombre para mi debe ser humilde, morboso y sediento de sexo pero sin resultar grosero ni guarro.
Me gusta que sea duro con ella, pero sin pasarse de la linea limite. Que ante todo desee darle placer a ella y disfrute siendo el juquete de una pareja morbosa.

Supongo que ire poco a poco cambiando esta entrada segun vaya descubriendo mas cosas sobre mi.